jueves, 4 de diciembre de 2014

SÍNDROME DEL CAMINO DE SANTIAGO

Parece que hacer el "Camino de Santiago" se está poniendo de moda. Durante toda la Edad Media fue una ruta concurrida que posteriormente fue en declive y en la actualidad ha vuelto a resurgir, pero como todo en la vida tiene sus pros y sus contras. El Dr. Jesús de la Gándara (Médico-Psiquiatra) y  humanista que ha estudiado a miles de peregrinos que realizaban esta ruta, llegó a la conclusión de que un porcentaje de estos peregrinos llegaban a padecer ansiedad y en ocasiones brotes psicóticos agudos que podían necesitar hospitalización. Estos males de los peregrinos tienen una tradición que data de la Edad Media, de ahí que existieran centros para atender a estos viajeros de a pie,  los cuales viajaban para curar sus enfermedades y paradójicamente algunos terminaban enfermando de otras. Esos senderos y caminos que llevan a Santiago de Compostela han sido pisados por variopintos personajes como juglares, aventureros, bandidos, vagabundos, condenados, y por supuesto los peregrinos de buena fe.

No, ahora peregrinan por placer, van bien equipados con grandes medios de apoyo y avituallamiento  como si de una excursión de placer se tratara en la mayoría de los casos y en otros para cumplir alguna promesa. Realizan etapas cortas, generalmente de una o dos semanas, o como mucho algún mes, lo hacen para disfrute y algunos en busca de nuevas experiencias. Esta moda de peregrinaje cuenta con todo tipo de ayudas, camino bien indicado, posadas, hoteles, centros sanitarios, es decir de una forma u otra están protegidos al tiempo que contribuyen a sostener la economía de los pueblos por los que pasan. El peregrino de antes necesitaba de todo tipo de ayuda, incluso existían normas y leyes para protegerles,  a esos es a los, que pienso yo, hace referencia el "Síndrome del Camino de Santiago".

El prototipo de peregrino de antes o eterno viajero, buscaba nuevas oportunidades con la consiguiente ansiedad que la incertidumbre le provocaba y esa ansiedad es la que probablemente, junto a sus creencias  de tipo místico e incluso mitológico le llevaban a la "meca del peregrino", Santiago de Compostela. La gran astenia que el recorrido le causaba así como el sufrimiento de los pies, el insomnio, la inclemencias del tiempo y el contraste brusco del arte y la belleza que en el camino encontraban, a lo que añadidos los probables antecedentes psiquiátricos, parece ser el origen de los brotes psicóticos (delirios, alucinaciones, paranoias...). El propio Gándara habla del Camino como "manicomio ambulante".



- Achotegui Loizate, J. "Síndrome del Camino de Santiago". El Viaje como experiencia transformadora. Una visión desde la Salud Mental. Pag 53-54. Grupo 2 Comunicación Médica SL. Madrid 2014. Alter.